Ya es complicado para un niño aceptar la separación de sus padres, pero a veces se complica incluso más cuando la madre o el padre encuentran a una nueva pareja con la que compartir su vida.
Por lo general la palabra madrastra o padrastro nos recuerda a los cuentos donde estos personajes siempre eran los malos. Hay que intentar desechar esa imagen ante los niños, ya que al principio es probable que estos la rechacen.
Muchos niños se niegan a aceptar a las nuevas parejas de sus padres porque sienten que al mostrarles algún tipo de afecto traicionan a sus padres naturales. En el caso de que la llegada de esa figura se produzca tras la muerte del padre o de la madre, la situación se complica todavía más.
Temores de los padres
A los niños les cuesta entender la necesidad de sus padres por rehacer su vida tras un divorcio o un fallecimiento, pero tampoco resulta sencillo para sus progenitores ya que, el padre o la madre biológicos también se pueden sentir inseguros por el miedo a perder el protagonismo en la relación con su hijo.
En este tipo de situaciones lo ideal es que ambos padres, los biológicos, hablen de esa nueva relación entre ellos y posteriormente se la expliquen al niño de forma conjunta.
Los niños suelen expresar aquello que sienten y necesitan saber que van a continuar recibiendo la atención del padre o la madre aunque estos tengan una nueva pareja. En general los cambios suelen generar inseguridad y desconcierto en los más pequeños, por este motivo es necesario que, si se quiere introducir en la familia a la nueva pareja, esto se haga de forma gradual, para que el niño vaya aceptando el cambio y pueda aceptarlo de forma más sencilla.
El padrastro o la madrastra
No debemos olvidar que además de los niños, son las nuevas parejas las que juegan un papel principal en esta nueva historia. Su actitud con respecto al niño será trascendental para que éste les acepte o rechace con más o menos intensidad.
No resulta fácil saber de que manera comportarse ya que cada niño es un mundo y reacciona de una manera diferente, aunque los expertos aconsejan las nuevas parejas se comporten siendo fieles a su forma de ser: una nueva figura adulta en casa y en la vida de los más pequeños.
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